«Faloforias»
paganas y «Risus paschalis» cristiano
Por Francisca Martín-Cano Abreu
Investigadora: Antropología de la Prehistoria
Durante la celebración de los rituales Mistéricos
sagrados de principios de época histórica (hace unos
2.500 años) llamados «Faloforias» y en otros
similares: «Gefirismos», «Stenias», «Damios»,
«Dicterios»... de regiones de la cuenca del Mediterráneo,
en honor de Diosas Hermafroditas, las Sacerdotisas bailaban en las
procesiones en su honor, con falos atados a la cadera a la vista
del público, mientras cantaban canciones satíricas
y obscenas y hacían burlas y chistes y se insultaban entre
sí en versos: yámbicos, coliámbicos, sillos,
hilarodías, sátiras, carminas.... Y más tarde
las Sacerdotisas celebraban las orgías (se masturbaban) autoestimulándose
con los falos o se estimulaban unas a otras en actos lésbicos,
lejos de la vista de los no iniciados.
Y justo este ritual es el que, según nuestro punto de vista,
estaría en el origen del «Risus paschalis» "Ostergelächter"
(Jacobelli, 1991), ritual obsceno practicado en el recinto sagrado
por Sacerdotes cristianos después de las fiestas de la «Semana
Santa», durante la liturgia de la pascua de Resurrección.
El ritual consistía exactamente en que los oficiantes cristianos
se subían los ropajes, mostraban los genitales y se masturbaban
ante los fieles, lo que provocaba sus risas. Además de los
gestos decían "palabras y cantos obscenos pronunciados
por el sacerdote desde el año 852 y, (...) documentada en
varias formas y en múltiples lugares, a través de
un larguísimo espacio de tiempo." (Jacobelli, 1991:
73).
Aunque seguramente el «Risus paschalis» se celebraba
con anterioridad, al menos 300 años antes, como ocurría
en España: "¿Desde cuándo ocurrían
en las iglesias hechos de este cariz? Sin pretender afirmar nada,
basta señalar que el III Concilio toledano (c. 589), en plena
época visigótica, ya dictamina que debe ser exterminada
la irreligiosa costumbre que el vulgo acostumbra a hacer en determinadas
fiestas de los santos, de modo que las gentes que deben atender
a los oficios divinos se entretienen con danzas y torpes canciones."
(Pepe Rey: 2004).
En España, no sólo practicaban los actos obscenos,
el Sacerdote y algunos fieles medio borrachos, durante el ritual
del «Risus paschalis», sino que también las practicaban,
las monjas en sus conventos, según han descubierto algunos
investigadores, razón por la que se hacían a puerta
cerrada. Añade Pepe Rey (2004): "El documento inquisitorial,
tras describir los instrumentos que intervienen, las partes del
oficio que se ven más afectadas de profanidad, los efectos
que produce todo ello en los asistentes, etc., finaliza así:
«Esto ha llegado a tal depravación, que há muchos
años que se dicen los Maitines de la Natividad del Señor
a puerta cerrada en todos los conventos de religiosas, por los excesos
y las palabras indebidas ...»"
El ritual del «Risus paschalis» pervivió
en algunos lugares hasta el XIX, según evidencia el hecho
de que en 1886, en Munich, fueron prohibidas por Linsemeier, Predigt,
según leemos en Holweck: 2004.
Interpretación dada al «Risus paschalis»:
para alegrar a los fieles
Los estudiosos han dado varias interpretaciones a la finalidad
del rito cristiano.
Una de ellas es: "... la interpretación del risus paschalis
(... que) da el padre jesuita Franciscus Borgia Gözenberger
(...) subraya la necesidad de alegrar la cuaresma a los fieles después
de la tristeza de la larga cuaresma." (Jacobelli, 1991: 67).
Y sería la misma razón banal: "expresión
de la alegría pascual por lo grotesco y chocante", en
se la que se apoyaron para extenderla a otras cuatro pascuas del
año: Navidad, Reyes, Resurrección y Pentecostés.
Pepe Rey, que ha investigado el tema, así lo afirma en (2004),
ya que: "... el concilio de Toledo de 1473 se lamentaba de
que: «en las catedrales y demás iglesias de nuestra
provincias existe la costumbre por parte de algunos -sobre todo
en las fiestas de Navidad, San Juan, San Esteban y los Inocentes,
en otros días festivos y con ocasión de misas nuevas-
de introducir en la iglesia, mientras se celebran los sagrados oficios,
espectáculos teatrales, máscaras, monstruos, elementos
grotescos y muchas otras cosas deshonestas y de todos los tipos;
por si fuera poco, se hace bulla y se recitan poesías lascivas
y sermones jocosos, de modo que el oficio divino queda interrumpido
y el pueblo se aleja de la devoción.»"
Pero desde luego no estamos de acuerdo en que esta razón
trivial, dada por quienes estuvieron manteniendo tal ritual durante
la Edad Media y el Renacimiento, fuese la primigenia razón
que motivó el «Risus paschalis», que se practicaba
en toda Europa durante las fiestas de pascuas, fiestas que son alegres
por definición y no necesita que la risa se persiga por actos
licenciosos sexuales. También María Caterina Jacobelli
la rechaza como una afirmación absolutamente superficial
(1991: 78), en lo que estamos totalmente de acuerdo.
Interpretación del «Risus paschalis»
asociado a cultos agrarios ligados a la primavera
Jacobelli cita a otros investigadores que vinculan el «Risus
paschalis» con los rituales arcaicos de las fiestas mistéricas
paganas "agrícolas" (1991, 76): "Algunos -Jacob
Grimm, A. Freybe, H. Holland- opinan que sus raíces lejanas
son sobre todo los cultos agrarios ligados a la primavera"
(Jacobelli, 1991: 75), y "... derivación similar del
culto de Ostara (la diosa de la primavera)".
Aunque Jacobelli no explicita en qué consistían los
ritos de la primavera de la Diosa Ostara. Pero desde luego serían
danzas femeninas orgiásticas, similares a las que se celebraban
en honor de Diosas de la Primavera en numerosas regiones, incluidas
las celebradas en época prerromana en España, según
comentaba Joaquín Costa en referencia de Sánchez Dragó
(1978, 222): "... danzas matriarcales y doncelliles que no
brillaban por su honestidad". Y que nosotros deducimos serían
similares a las «Faloforias» «Gefirismos»,
«Stenias»... de las que hemos hablado con anterioridad
(y que consideramos origen del «Risus paschalis»), durante
las cuales las Sacerdotisas de Diosas Hermafroditas, bailaban con
falos atados a la cadera a la vista del público, mientras
cantaban canciones obscenas e insultaban a los fieles y entre sí,
con carácter sagrado.
Interpretación del ritual cristiano «Risus
paschalis» desde el ritual pagano que recordaba el mito de
Demeter y Yamba / Baubo
También Jacobelli ve el origen del «Risus paschalis»
en rituales «Mistéricos» de religiones paganas
griegas y egipcias: "... cuyo origen pagano habría que
buscar seguramente en los ritos mistéricos de la diosa Démeter
(s. VII-VI a. C.), aunque en el s. XII a. C. existe en Egipto una
tradición similar referida a los dioses Ra y Hator"
[idea recogida por Anónimo (Edad Media): 2004].
En la versión ática del mito pagano y de los cultos
«Mistéricos» de la Diosa Demeter del siglo VII
a los que alude Jacobelli, eran los practicados durante los Misterios
Eleusinos, que incluía los ritos «Gefirismos»,
durante los cuales las mujeres y las Sacerdotisas hacían
libaciones de bebidas embriagadoras, paseaban con falos, decían
groserías y sátiras, hacían todo tipo de obscenidades
y después participaban en orgías sagradas. Diversas
fuentes exponen que tales ritos surgieron en recuerdo de la manera
en que la anciana de Tracia, Iamba / Yamba / Baubo, logró
hacer reír a la Diosa Demeter / Ceres al verla llena de dolor
por la muerte de su hija Cora / Coré / Proserpina / Perséfona:
le contó unos cuentos indecentes en versos yámbicos
y realizó un gesto obsceno subiéndose los ropajes,
lo que provocó la hilaridad de la Diosa Demeter / Ceres.
De forma que ella ve el paralelismo del Sacerdote cristiano, que
con un gesto obsceno muestra su falo inhiesto y cuenta unos cuentos
indecentes para hacer reír a los fieles, con el gesto obsceno
de mostrar los genitales femeninos y contarle cuentos indecentes
a la Diosa, que según la versión ática del
mito pagano, hace la anciana Yamba / Baubo, aunque nosotros no lo
veamos. Para nosotros no hay ninguna analogía entre mostrar
los genitales femeninos y los genitales masculinos, aunque tengan
la misma función: hacer reír. Ni tampoco vemos paralelismo
en el hecho de hacer reír a los fieles, el día de
pascua en que se conmemora la resurrección de Jesús,
-y por tanto ya están contentos-, y el hecho de hacer reír
a la Diosa Demeter / Ceres, el día en que se conmemora la
muerte de su hija, por lo que estaba triste, desconsolada y de luto.
[En las diferentes narraciones que conocemos del mito no se especifica
que la anciana Yamba / Baubo mostrase algún artilugio bajo
sus ropajes, sino que se entiende que le enseñó el
pubis (en la versión de Arnobio lo gracioso era que la anciana
mostraba unos genitales sin pelos. pelos. En otra versión
mostraba la cara de Yaco, hijo de Dionisio, que se había
pintado en el vientre), pero hemos sabido que existe el baubón,
nombre también dado al dildo / consolador / olisbos. Por
lo que la anciana llamada Yamba o Baubo según qué
versión del mito, llevaría un falo artificial atado
a sus caderas / un baubón, razón por la que se bautizaría
con su nombre al falo atado y que produjo la hilaridad de Demeter.
Tal hecho acredita nuestra hipótesis del origen del «Risus
paschalis» cristiano, en las fiestas de Misterios paganas
en las que eran las mujeres las que mostraban un falo artificial].
Nuestra interpretación del «Risus paschalis»
y del mito de Demeter y Yamba / Baubo
Por nuestra parte consideramos que ambos hechos religiosos, cristino
y pagano, son herederos de otros arcaicos, que aunque conservan
el modelo original, se les ha añadido y modificado esencialmente
la forma, sentido mágico y mitológico y el tiempo
de celebración. Suponen una compleja síntesis que
combina diferentes influencias de mitologías anteriores y
otros aportes, pero dejando de lado la procedencia metafórica.
En principio, tanto el ritual del «Risus paschalis»
como el mito de Demeter y Yamba / Baubo formaban parte de las fiestas
de muerte y resurrección de un ser mortal, paredro de la
Diosa (hijo, hija, amante...), asociado metafóricamente a
la muerte y entierro de la semilla y su posterior germinación.
De forma que los diferentes episodios agrícolas, se conmemoraban
en las fiestas agrícolas Mistéricas, que eran tanto
fiestas trágicas (de duelo), a la vez que cómicas
(incluían las palabras soeces y los gestos obscenos). Y fiestas
que reflejaban de forma metafórica las diferentes fases de
la historia de la agricultura, desde que se enterraba / moría
la semilla, hasta que germinaba / resucitaba.
Se celebraban en tiempo de siembra (bien antes de la primavera,
bien antes del otoño, ya que había dos épocas
agrícolas).
En la religión pagana, ambas fases trágico-cómicas
corresponden a las fiestas llamadas: «Misterios Eleusinos»
(había Grandes y Pequeños Misterios, en primavera
y en otoño) y en la cristiana, la fase trágica corresponde
a la fiesta de la «Semana Santa». Y ambas fiestas conmemoraban
la muerte del paredro / del grano, un episodio de las fiestas agrícolas.
Después, ambas, eran culminadas con la fiesta de «Resurrección»
"germinación de semilla", «Ánodos»
"resurrección de Proserpina" en la pagana y "resurrección
de Jesús" en la cristiana. Y gracias en un caso a las
lágrimas de la Diosa Madre Salvadora, Demeter, y en otro
a las lágrimas de la Virgen Dolorosa, María.
Así, en los «Misterios Eleusinos» se celebraba
la tristeza y el dolor de la Diosa Madre Demeter por la muerte de
su hija Cora (siembra de semilla) y después su vuelta (germinación
en vegetación). Al respecto comenta Pomeroy (1987, 94): "Los
Misterios (...) en Eleusis en honor de Demeter y su hija Coré
(Perséfona). Los ritos en los primeros tiempos estaban concebidos
con la muerte y resurrección de los granos y los frutos ...".
Y lo mismo conmemora la fiesta cristiana de la «Semana Santa»,
que es narrado en el drama cristiano: la Madre Dolorosa llora la
muerte de su hijo Jesús (la semilla) que resucitará
días después como cereal, para dar de comer a la humanidad
[aunque los cristianos no quieran acordarse de que la religión
cristiana es heredera de las religiones paganas, es decir "agrícolas".
Como dice Pepe Rey (2004): "Cuando los moralistas de antes
y de ahora se lamentan de la paganización de las fiestas
navideñas, deberían reconocer que siempre fueron paganas,
puesto que paganus es lo relativo al pagus, el campo..."].
Misterios Eleusinos
En la versión más temprana de la fiesta Eleusina,
exclusivamente participaban mujeres, acorde con el feminismo de
las protagonistas de los mitos. Conmemoraban la muerte trágica
de Cora (semilla), mientras la Diosa Madre Demeter Eleusina / Ceres
Melania la buscaba recorriendo el mundo de luto y llorando desconsoladamente.
Incluía procesiones públicas y rituales secretos dirigidos
por Sacerdotisas Eleusinas y Sacerdotisas Coras. Durante el rito
cómico de los «Gefirismos» competían con
pacíficas armas tratando de lanzar el verso más satírico
y la zumba que hiriera más profundamente los oídos,
hacían libaciones de bebidas embriagadoras (a veces en ánforas
orgiásticas) y participaban en ritos orgiásticos (masturbaciones
femeninas colectivas con falos) durante las «Coreyas»
/ «Coreas» de Cora.
La razón de los actos y de toda la doctrina Mistérica
matriarcal era secreta y estaba en manos de las Sacerdotisas de
culto, que lo transmitían a las personas elegidas para ser
iniciadas. Sólo ellas sabían porqué el mito
narraba que la Diosa recorría el mundo desconsolada y a pesar
de ello no trataban de consolarla; el porqué durante los
rituales decían palabras hirientes; el porqué había
necesidad por fin de conseguir la hilaridad de la Diosa Demeter;
el porqué de las orgías... Si lo hacían así
era porque, cuando inventaron los mitos y los ritos, habían
dado un sentido metafórico a todas las descripciones y acciones,
e imaginaban que tendrían función mágica:
1. Pensaban, por un lado, que gracias a las palabras hirientes
dichas durante el ritual, serían como flechas que lastimarían
los oídos de la Diosa, aumentarían su desconsuelo
y como Madre Llorona lloraría, siendo las lágrimas
derramadas la causa de la lluvia. Por eso el mito describía
también que la Diosa Llorona recorría el mundo de
luto y desconsolada, aludiendo a las nubes de tormenta que se desplazaban
por el cielo llenas de lluvia, y gracias a ciertas "flechas"
metafóricas, hacían que el agua de su interior se
descargaran / las nubes soltaban la lluvia.
2. A la vez los actos obscenos con falos que provocaban la hilaridad,
así como la masturbación de las representantes humanas
de la Diosa que reirían y babearían también
de placer, al igual que hacía que sus vaginas segregasen
líquido y sus bocas babas, por transportabilidad mágica
propiciaría que también la Vagina de la Madre Naturaleza
segregase torrentes de líquido en forma de agua de lluvia.
Y era así cómo pensaban que se estimularían
las Fuerzas Fecundantes de la Diosa Demeter (Hermafrodita) provenientes
del cielo: con palabras y actos con significación mítica,
como metáforas funcionales de lluvia, que ayudarían
a la Madre Divina a soltar el agua para que descendiera al mundo
subterráneo, donde se hallaba la semilla muerta y enterrada
(Cora) y la haría germinar (resucitar).
Posteriormente el mito eleusino tuvo otras versiones, algunas contradictorias.
En la versión órfica-alejandrina, lo que hacía
reír a la Diosa Demeter / Ceres era la vista de la figura
de Iachos / Iacos / Iaachos que aparecía debajo de los ropajes
de la anciana cuando ella se los subía (Iacos sobrenombre
del Dios Baco / Dionisio, adorado como niño y considerado
hijo de Ceres y de Júpìter y hermano y prometido de
Proserpina / Cora. Y en otra versión se le identificaba con
Zagreo / Dionisio, hijo de Júpiter y de Proserpina, que recién
nacido fue muerto, despedazado y castrado por Titanes, después
resucitado).
En este caso, el hecho de que la versión órfica-alejandrina,
además de la anciana Yamba / Baubo, se incorpore al joven
Iachos, obviamente muestran que fueron añadidos, tras la
religión Mistérica matriarcal cambiar de manos. Dado
que los mitos, los rituales y los cultos religiosos habían
sido heredados de una época anterior, los Sacerdotes usurpadores
no tenían explicación para muchos hechos religiosos,
debido al secretismo con que la doctrina había sido mantenida
desde la Prehistoria, por lo que el conocimiento analógico
no pasó directamente a sus manos. Por lo que al no haber
accedido a todos los secretos, desconocían el sentido mágico
y el carácter metafórico de los mitos y los rituales
satíricos y orgiásticos.
Y sobre todo les debía resultar extraordinario que no se
tratara de consolar a la Madre desconsolada, sino que paradójicamente
durante el ritual que conmemoraba su tristeza, se le lanzasen palabras
hirientes y que se dijesen todo tipo de chistes y chanzas cómicas.
De ahí que a partir de cierto momento elaboraran el mito
de que la anciana Yamba hace reír a la Diosa con cuentos
obscenos y gesto indecente, para consolarla. Ello daba razón
y justificaba, con una explicación fantasiosa: "recordar
el pasado Divino", del por qué durante los «Gefirismos»
las mujeres contaban cuentos chistosos y hacían la obscenidad
de mostrar un falo.
Y posiblemente, con la evolución patriarcal, a las mujeres
se les impedirían que se ataran los falos a la cintura, y
para recordar el "nuevo" pasado, mostrarían sus
genitales femeninos y los varones devotos serían los que
enseñarían sus propios falos y los que se masturbarían,
según la tradición les había enseñado
(aunque habían hecho mujeres, no varones).
Pero a pesar de tales añadidos, en los rituales de esa época,
la Diosa Demeter seguía conservando su carácter Hermafrodita,
como evidencia el hecho de que las orgías se seguían
celebrando en su honor (como Diosa Hermafrodita se esperaba que
Ella enviase las Fuerzas Fecundantes de la Naturaleza: el agua de
lluvia que asegurara la Fertilidad de la cosecha). Y así
en las «Grandes Eleusinas» durante la procesión
de Iaachos / Iacos/ Baco / Dionisio desde Eleusis (en la que el
Iacagogos llevaba su estatua coronado de mirto y los Sacerdotes
Itifalóforos llevaban un falo en representación del
que le faltaba, puesto que lo habían castrado los Titanes),
coros de mujeres realizaban disputas burlescas e invocaban a la
Diosa mientras decían: "«¡Oh Démeter,
reina de las santas orgías! Socórrenos..." (E.
U. I.,Tomo 25, 1994: 1151).
Y aunque con la evolución patriarcal, los Misterios de Eleusis
desembocasen en fiestas nocturnas, en las que participaban devotos
de ambos géneros, que se entregaban a las bacanales en el
«Carnaval de Dionisio», el rito de promiscuidad no tenía
todavía el sentido mágico de asegurar la germinación
de la semilla, gracias al poder Fecundante de Dionisio (ya que estaba
castrado), como más tarde lo tuvo al modificarse los mitos.
[(Vemos que el «Carnaval del Dios Dionisio» pagano
seguía a las fiestas de duelo «Eleusinas de la Diosa
Demeter», mientras que en el cristianismo se trastocó
el orden, al anteponer el «Carnaval» a las fiestas religiosas
de muerte y resurrección de la «Semana Santa».
Traslación de fiestas para que los fieles no vieran la analogía
entre las paganas y cristianas, y la apropiación de otro
de los innumerables rituales paganos, imitados por los jerarcas
cristianos).
Hasta que finalmente se interpretó la Fertilidad de la semilla
en términos sexuales y se vinculó a la unión
mágica de ambos Principios: femenino y masculino como necesario
para asegurar la cosecha (gracias a la unión de las fuerzas
de la Tierra femenina, que acogía la semilla en su Seno,
con las del Cielo masculino, que enviaba aguas seminales, se producía
la fecundación y se aseguraba la cosecha). Y estos rituales
consistían en hierogamias sagradas, bien en actos sexuales
sagradas reales, con el apareamiento de la Sacerdotisa y del Sacerdote
supremo, representantes de la Pareja de Dioses que reactualizaban
ritualmente todos los años, o con parejas de obras de arte
vinculadas a ambos sexos].
Semana Santa
También en el mito cristiano, que es conmemorado en la fiesta
cristiana de la «Semana Santa», se narra el drama similar
de una Madre que llora la muerte de su hijo que resucitará
días después como cereal (muere como semilla de vida
para dar de comer a la humanidad, lo que evidencia que es heredera
de los mitos y rituales de muerte y resurrección de las religiones
precedentes paganas, es decir, "agrícolas", celebrados
en honor de Diosas en tiempo de siembra de semillas, y que Salvaban
a sus paredros / semillas, y asociados a la historia de la agricultura).
Durante las procesiones se pasea la escultura de Jesús muerto
y de su Madre la Virgen Dolorosa que llora y se lamenta por la muerte
de su hijo Jesús (el llanto equivale a las lluvias que lo
resucitarán) y los fieles le cantan "saetas" (cuyo
nombre evidencia su relación con las antiguas palabras soeces
de los «Gefirismos» que herían).
Dado que el ritual obsceno cristiano del «Risus paschalis»
en el que los Sacerdotes mostraban su falo, se masturbaban y decían
obscenidades, se celebraba como culminación de la fiesta
de muerte la «Semana Santa», durante la pascua de Resurrección,
pone de manifiesto que los jerarcas, al posponerlo a los días
de duelo de «Semana Santa» y al separarlo del canto
de "saetas", quisieron cambiarle de significado y reconvertido
para que no se notara que imitaba las fiestas precedentes paganas.
Pero en realidad, tanto el canto de "saetas" como el
«Risus paschalis» serían herederos de los «Gefirismos»
durante los cuales las Sacerdotisas decían obscenidades,
llevaban falos atados a la cintura (las mujeres mostraban genitales
masculinos artificiales, no los varones) y celebraban orgías
(se masturbaban) con la finalidad mágica de propiciar la
lluvia: aumentar el desconsuelo de la Diosa y hacerla llorar, a
la vez que hacerla reír y babear y propiciar que la Vagina
de la Madre Naturaleza segregase torrentes de líquido en
forma de agua de lluvia.
Pero el canto de "saetas" cristiano se lo ha despojado
de su razón metafórica y cómica de herir y
hacer reír con obscenidades a la Madre Virgen y Dolorosa.
Y también a las masturbaciones de los oficiantes durante
el «Risus paschalis» se lo ha despojado de su función
mágica: propiciar que se produzca "semen" Divino
que haga germinar la semilla. Y se ha pospuesto de momento de celebración,
ya que se celebra precisamente cuando la semilla ha germinado /
Jesús ha resucitado.
Aunque sorprendentemente, los jerarcas fueron más allá
del ritual de las Sacerdotisas paganas, que sólo mostraban
el falo artificial al público y mantenían en secreto
el ritual nocturno orgiástico-masturbatorio [que sólo
se llegó a divulgar en qué consistían, tras
ser expiadas las mujeres mientras celebraban sus rituales secretos,
según contaba Juvenal (n. 140 adne). Y a partir de entonces
fueron muy censuradas desde la ideología patriarcal y las
masturbaciones descalificadas como: "cosas abominables."
(Campbell, 1992: 253). Llegando a ser prohibidos y duramente castigadas,
incluso con la pena de muerte a quienes las siguieran practicando].
Mientras que el Sacerdote cristiano hacía ambas cosas ¡a
la vista del público! ¡Y éstos, ante el espectáculo,
se reían!
Lo que constata el efecto distorsionador provocado por la doble
moral de los jerarcas cristianos: criticaron de forma hipócrita
y fanática y muy duramente las tradiciones matriarcales.
Así consiguieron que los fieles aborrecieran la falta de
pureza femenina, ¡pero ellos, amparándose en nombre
de la virtud, convirtieron en ritual sagrado la masturbación
masculina!
Conclusión
Aunque Jacobelli vea como origen antecedente del «Risus paschalis»
cristiano en el mito de la versión ático-eleusino
del siglo VII de la Diosa Demeter que incorpora al personaje de
la anciana Yamba, cuyo gesto obsceno se rememoraba en las fiestas
«Eleusinas» para hacerla reír, consideramos que
tal personaje sería incorporado entonces por un colegio sacerdotal
ya patriarcal, que modificó el original mito de la Diosa
Demeter y su hija Cora, para explicar y dar cabida a los varones
en los rituales orgiásticos.
Y no puede estar en el origen puesto que no existe paralelismo
en el hecho de que la anciana muestre su genitales femeninos con
el hecho de que sean los Sacerdotes los que muestren los suyos en
el ritual cristiano.
Más bien el modelo que estaría en el origen de «Risus
paschalis» sería anterior: cuando se inventaron los
rituales matriarcales de los «Gefirismos», las «Stenias»,
las «Faloforias»... celebrados en honor de Diosas Hermafroditas,
en tiempo de siembra, durante los cuales las Sacerdotisas se ataban
falos y paseaban con ellos inhiestos ante los fieles y hacían
sátiras y chistes sarcásticos, cuyo carácter
metafórico hemos explicado con anterioridad.
Lo evidencia además el ritual que celebraban los Baptos,
Sacerdotes afeminados al servicio de la Diosa Cotis y otros en honor
de la Buena Diosa. Así sabemos que en ciertas regiones, con
la evolución patriarcal, fueron los varones los que invirtieron
el rito y alejaron a las mujeres de las fiestas. Entonces eran ellos
los que travestidos, con sus largas cabelleras aprisionadas con
redecillas de oro, vestidos con telas a cuadros azules o de tejido
verde claro y pintado el rostro como las mujeres ayudados por los
espejos (Juvenal, 1982:52), los que participaban en exclusiva en
los ritos nocturnos alumbrados con antorchas, bebían en príapos
de cristal y cometían toda clase de obscenidades.
En otra evolución del ritual pasó a personajes grotescos
masculinos la función de decir groserías (similares
a las palabras soeces que las griegas recitaban en los «Gephyrismi»
y en la «Stenia» en honor de Diosas de carácter
sagrado): los citerias (epónimo de su antecesora Citeria,
que junto con Petreya decían chistes groseros en fiestas
de Roma), especie de polichinelas / pulchinela burlescos que acompañaban
en ceremonias sagradas italianas.
Y parece ser de alcance universal, según refiere Campbell
(1991, 311-312): "En las costumbres del carnaval de Europa,
esta figura sobrevive en los numerosos payasos, bufones, demonios,
polichinelas y diablillos que interpretan exactamente los papeles
de los payasos en los ritos de los indio pueblo, y dan a la fiesta
un carácter de día de desorden. Representan, según
el punto de vista de los maestros del decoro, el principio del caos,..."
Con este antecedente ¿qué excusa les queda a los
jerarcas para que no dejen entrar a las mujeres, como Sacerdotisas
en el culto, después de haberles copiado todos los ritos
sagrados, incluido las orgías celebradas durante las «Faloforias»,
los «Gefirismos», las «Stenias» ... que
se celebraban en todo el universo, cuando la religión agrícola
era matriarcal?
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